CAMAGÜEY.-El mes de marzo es el primero del calendario romano y el tercero del gregoriano. Toma su nombre de Marte, dios de la guerra, para los romanos.
Durante el mes de marzo ocurre, alrededor del día 21, uno de los dos equinoccios del año: el de primavera en el hemisferio septentrional y el de otoño en el hemisferio meridional.
La piedra de marzo es el aguamarina, y su flor, el narciso.
Varios refranes se asocian a este mes:
En marzo la veleta, ni dos horas está quieta.
Marzo y septiembre cual hermanos: uno dice adiós al invierno y otro al verano.
Marzo airoso, abril lluvioso, sacan a mayo florido y hermoso.
En este mes de marzo son numerosas las conmemoraciones patrias, entre ellas: el abominable sabotaje al vapor La Coubre (4 de marzo); el asalto al Palacio Presidencial y a la emisora de Radio Reloj, así como la muerte del líder estudiantil José Antonio Echeverría (13 de marzo); la fundación del periódico Patria, cuya fecha se instituyó luego como Día de la Prensa Cubana (14 de marzo) y la protesta de Baraguá (15 de marzo).
Pero hay una efemérides especial. Según dijera el Apóstol:
“… las campañas de los pueblos son solo débiles, cuando en ellas no se alista el corazón de la mujer; pero cuando la mujer se estremece y ayuda, cuando la mujer, tímida y quieta de su natural, anima y aplaude, cuando la mujer culta y virtuosa unge la obra con la miel de su cariño, la obra es invencible”.
El 8 de marzo es el Día Internacional de la Mujer.
El Día Internacional de la Mujer se celebró por primera vez en Cuba en 1931 y fue organizado el acto por la Central Nacional Obrera de Cuba y la Federación Obrera de La Habana.
En el mundo se conmemoró desde 1910, a petición de Clara Zetkin y he aquí un dato curioso: en abril de 1869, Ana Betancourt Agramonte en la Asamblea de Guáimaro exigió la igualdad de derechos para la mujer en relación con el hombre, se convertía así en la primera líder femenina cubana, por lo que ocupó una posición de vanguardia en el feminismo mundial (Clara Zetkin solo tenía 11 años en esa fecha).
Parafraseando al Maestro a la mujer no se le debe oprimir el pensamiento y obligarla a que viva, escondiendo sus impresiones, como un ladrón escode su tesoro en una cueva.
Muchos han sido los versos dedicados a la mujer. Disfrutemos algunos:
Mujer es un verso herido, / que pide auxilio al poeta./
Mujer es palabra inquieta/ que llena de amor el nido. /
Mujer es pulso y latido/ de la vida y su historia. /
Mujer es laurel, victoria/ que haciendo crecer su nombre / hoy comparte con el hombre/ el sacrifico y la gloria.
NADA MÁS CONTRADICTORIO QUE SER MUJER…
Mujer que piensa con el corazón actúa por la emoción y vence por el amor…
Que vive un millón de emociones en un solo día, y transmite cada una de ellas con una sola mirada…
Que vive buscando la perfección y vive tratando de buscar disculpas para los errores de aquellos a quienes ama…
Que hospeda en el vientre otras almas, da a luz y después queda ciega, delante de la belleza de los hijos que engendró…
Que da las alas y enseña a volar, pero no quiere ver partir los pájaros aún sabiendo que no le pertenecen…
Que se arregla toda y perfuma la cama, aunque su amor no perciba más esos detalles…
Que como una hechicera transforma en luz y sonrisa los dolores que siente en el alma solo para que nadie lo note…
Y aun tiene fuerzas, para dar consuelo a quien se acerca a llorar sobre su hombro…
¡Feliz del hombre que sepa entender el alma de la mujer!