CAMAGÜEY.- La cubana Omara Durand rompió su propio record mundial en 200 metros planos de la categoría T12 para colgarse la medalla de oro en los Juegos Paralímpicos de Tokio 2020 y erigirse como la mejor velocista de todos los tiempos en estas citas.

Junto a su guía Yuniol Kindelán, la criolla completó la distancia en 23.02 segundos, una centésima de segundo por debajo de su anterior plusmarca, que databa del campeonato mundial de Doha en 2015. Al entrar a la pista y percatarse que estaba lloviznando, casi nadie pronosticó que podría lograr la hazaña, pero la excelencia de la dupla demostró su clase.

La ucraniana Oksana Boturchuk (24.48), la rusa Anna Kulinich-Sorokina (24.85) y la venezolana Alejandra Paola Pérez (25.27) compitieron entre ellas para los restantes dos lugares del podio, mientras la nuestra completaba su paso perfecto por el estadio olímpico y mantenía su invicto de una década.

Esta fue la octava medalla de oro de la santiaguera en paralimpiadas y la sexta desde que corre acompañada de Kindelán, pues antes, cuando su estado visual era mejor, obtuvo dos en Londres 2012 en la clase T13, en la cual no se necesita compañía. Desde Río 2016 la pareja cubana ha conseguido las coronas en las tres distancias de velocidad y ha hecho lo mismo en mundiales de paratletismo y reuniones regionales.

En declaraciones a la prensa, Omara y Yuniol reconocieron el trabajo de su tríada médica, de su entrenadora Miriam Ferrer y la diva de las pistas lanzó una dedicatoria especial a su pequeña hija Erika, quien se gestaba en su vientre

Con la extraordinaria actuación de la deportista paralímpica más rápida de la historia, Cuba ascendió nuevamente al puesto 33 de la tabla por países con cosecha de cuatro coronas, un subtítulo y un metal de bronce. A falta de una jornada, el medallero sigue dominado por la República Popular China, que acumula 93 preseas de oro, 57 de plata y 50 de bronce, seguida por Gran Bretaña (41-38-43) y Rusia (36-32-49), que desplazó a Estados Unidos (35-36-30) del tercer escalón.