CAMAGÜEY.- En la totalidad de los municipios camagüeyanos ya se vacuna con Abdala a los grupos más vulnerables. Los cuatro que iniciaron como intervención sanitaria por territorios de riesgo cuando era candidato vacunal, Camagüey, Florida, Carlos Manuel de Céspedes y Sierra de Cubitas, concluyen con la tercera dosis del esquema, mientras Nuevitas termina la segunda y Esmeralda la primera.
Más de 205 000 citadinos en el municipio cabecera han recibido las tres dosis del inmunógeno, lo que representa el 96,5 % del universo a vacunar. La doctora Sonia María González Vega, jefa de la sección de atención primaria de Salud en la provincia e investigadora principal de la intervención sanitaria, explicó a Adelante que la cifra debe aumentar porque se recupera a aquellos que no se pudieron inmunizar y no tenían un criterio de exclusión permanente.
Carlos Manuel de Céspedes, con más 12 000 vacunados, y Florida, con más de 38 000 también transitan por la tercera dosis, al 92,5 % y al 90 %, respectivamente, y deben concluir el proceso esta semana, pero al tener altos índices de contagio no podrán sobrepasar el 95 % del universo inicial.
“Algunos se han quedado solo en la primera y segunda dosis, porque en la medida que se infectan van saliendo del esquema, aunque los estudios más recientes ratifican que el título de anticuerpos de una persona que sobrepasó la enfermedad es igual o superior a los que produce la vacuna”.
En Sierra de Cubitas más de 10 000 personas han recibido la tercera dosis, lo que representa el 94 % del universo, y significa que podrán llegar al umbral que considera una población inmunizada, el 95 %. “Se trata de recuperar hasta al que ha perdido el esquema por razones no definitivas de exclusión, porque mientras más personas se abarque, más seguros estamos todos”, añadió González Vega.
La especialista informó que realizan estudios de impacto en la población para validar la tesis de que los vacunados tienen una respuesta totalmente distinta a los no inmunizados y que evolucionan hacia las formas más leves de la enfermedad o no les aparecen síntomas.
“La mayor incidencia de la epidemia se mueve hacia los grupos que no están protegidos, fundamentalmente los menores de 19 años, niños y adolescentes, sobre todo en el municipio de Camagüey, mientras que disminuye en la población adulta, aun con la presencia de la cepa Delta que ha modificado los por cientos de efectividad de todas las vacunas del mundo”.
No obstante, hay que recordar que el título máximo de anticuerpos solo se obtiene 56 días después de concluido el esquema completo.
La segunda dosis de Abdala ha llegado a más de 37 000 nueviteros, el 98 % de los previstos, y Esmeralda inició hace una semana y ya abarca el 90 % en la primera. Respecto a este último, la especialista enfatizó en que se trata de una carrera contra la COVID-19, por la alta transmisión que presenta ahora mismo el virus en el noroccidental municipio.
También como intervención sanitaria se incluyeron varios grupos de riesgo: los nefrópatas, que lo hicieron como parte de la población o en el vacunatorio del hospital Manuel Ascunce, y los 50 transplantados, de los que se han vacunado 48 en la primera vuelta. Además, el 83 % de las gestantes, puérperas y mujeres que lactan ya recibieron la segunda dosis; entre ellas tampoco se registran reacciones adversas.
Ahora, en la totalidad de la provincia, Abdala llega a otros grupos de riesgo como cardiópatas, diabéticos y personas con obesidad extrema, además de todos los mayores de 60 años sanos. “Después de sumar este último universo, solo quedaría pendiente el 16 % de la población camagüeyana mayor de 19 años”, dijo la doctora González Vega.
Resaltó que las condiciones del territorio, en cuanto a inmunización, son muy buenas para hacer frente a la epidemia y reiteró el llamado a la disciplina.
“La vacuna es efectiva pero no se pueden dejar de cumplir las medidas de contención, hay que tener responsabilidad personal y familiar. Nos duelen mucho las cifras de lactantes, embarazadas e incluso nonagenarios contagiados. Vemos en las calles muchos de estos grupos vulnerables que no debieran salir de casa. Además, tenemos el deber de proteger a los más de 6 800 alérgicos al timerosal hasta que lleguen las dosis sin dicho producto”.
La vacunación avanza por la provincia, cada vez estamos más cerca de los números que necesitamos para frenar la transmisión, pongamos nuestra parte, hagamos lo que nos toca para que la epidemia no nos siga llevando gente querida, no siga truncando vidas.