CAMAGÜEY.- Inicia la etapa de verano en Cuba, y la Jefatura Provincial de Tránsito refuerza las medidas preventivas para evitar accidentes en la vía. La recogida de animales sueltos en la carretera, el mayor rigor en las inspecciones técnicas a los vehículos y el incremento de la vigilancia y el patrullaje son acciones que se intensificarán en los meses de julio y agosto.

Aun cuando cada cual tiene la responsabilidad de cuidarse todo el año, la temporada vacacional genera riesgos por las concentraciones de personas, los traslados masivos y la ingestión de bebidas alcohólicas.

Si esta fecha en sí se torna difícil para disminuir la accidentalidad, ahora se suman las disposiciones sanitarias ante el virus del sars cov 2. María Victoria Caballero Sánchez, secretaria de la Comisión Provincial de Seguridad Vial, se refirió a las disposiciones sanitarias que deben cumplirse para evitar futuros contagios de COVID-19.

“Velamos por el uso del nasobuco tanto en los ómnibus como en las paradas, y que al interior de cada transporte no se exceda el número de personas permitidas. En la actual etapa se admite ocupar la totalidad de los asientos y hasta el 70 % de pie”.

Asimismo explicó que se aplicarán con severidad medidas como la exigencia de la licencia de conducción y el adecuado uso del casco de protección a los que circulen en motos y ciclomotores. Esto no quiere decir que se obvie a los demás choferes, solo que al aumentar el número de esos medios de transporte se acrecienta también el riesgo de accidentes.

Por su parte, el Mayor Juan de Dios Pérez Gutiérrez, primer oficial de Tránsito en el territorio, precisó que para evitar traslados en horarios nocturnos, el regreso de los centros recreativos será a las cinco de la tarde. Además, “se ubicarán puntos fijos de alcoholemia e inspección técnica en diez zonas vulnerables de la provincia, sobre todo en aquellas rutas que conducen a playas, campismos, etc.”.

El grupo de especialistas no solo se dedicará a hacer las pruebas de alcohol a los conductores, sino a velar por su estado de salud en general, las condiciones de los autos y el cumplimiento de lo establecido desde el punto de vista sanitario, según cada etapa.

“Nuestra meta siempre ha sido la prevención, por eso no hemos detenido las labores ni en los meses de cuarentena; sin embargo, todavía la población no ha adquirido una cultura vial acorde con las dinámicas del tránsito y sigue cometiendo infracciones, sobre todo en los métodos alternativos de transportación (bicitaxis, coches) y en las motorinas. En eso debemos insistir más”, comentó el Mayor Pérez Gutiérrez.

Al cierre de junio, Camagüey mostró una disminución en las cifras de siniestros, fallecidos y lesionados en comparación con igual período del 2019, debido en parte a la inactividad masiva provocada por el nuevo coronavirus. Las causas más repetidas de los accidentes fueron no prestar atención al control y dirección del vehículo, adelantamientos indebidos, excesos de velocidad, no respetar el derecho de vía y la ingestión de bebidas alcohólicas.