CAMAGÜEY.- Cuando este 23 de agosto la Federación de Mujeres Cubanas celebre su aniversario 60, lo hará con el regocijo de haber reconocido y estimulado las buenas prácticas. Entre lo reconocido, está la siembra en los patios para el autoabastecimiento de la familia y la comunidad.
“A propósito de nuestros 60 años, nos hemos propuesto incorporar 60 patios por cada consejo popular al movimiento de la Agricultura Urbana, Suburbana y Familiar”, comentó a Adelante Digital Anielka Fernández del Monte, miembro del secretariado nacional de la Federación de Mujeres Cubanas a cargo de las tareas de promoción de la mujer y atención a la familia.
“Tenemos en el país más de 15 000 patios declarados en el movimiento de la agricultura urbana. No podemos decir que empezamos ahora, sino que lo estamos organizando con más fuerza. En la provincia el movimiento ha prendido y estamos gestionando que se vendan semillas, pollitos… porque a veces la gente tiene la disposición pero faltan recursos.
“Se avanza pero tenemos que hacer más. Nos sentimos felices en patios como los de María, pero tenemos que sentirnos responsables por los que hoy no tienen nada sembrado. Cuando producimos desde la comunidad estamos ahorrando combustible, transporte y en esa sostenibilidad alimentaria de la cual se habla en el país está contribuyendo también la Federación de Mujeres Cubanas”.
EL PATIO DE MARÍA
Este fue uno de los declarados 60 Aniversario, porque ya estaba incorporado al movimiento de la Agricultura Urbana, Suburbana y Familiar. Más de 20 cultivos entre frutas, vegetales y viandas, sin contar las plantas ornamentales, están a cargo de María Calero Quintero y su mamá Cila Caridad Hernández Chacón, de 97 años.
“Nací en el campo, me gusta la tierra, y me duele verla con yerba y no con comida. Yo no vivo de esto pero vivo para hacerlo. Me reconforta que el fruto se queda en la comunidad que no tiene que caer en manos de revendedores”, comentó María.
Cila es la responsable del riego y de atender las plantas ornamentales.
Con orgullo muestra sus frutos
MACETAS SINGULARES
Margarita Arboláez Calderón prefiere las plantas ornamentales, pero con la ayuda de su esposo incursiona también en los frutales porque “ayudan en la alimentación y la economía”.
Entre las singularidades que distinguen su patio destacan algunos objetos utilizados para sembrar. “Donde quiera que se puede echar un poco de tierra puede sembrarse una planta”, asegura Rogelio Rodríguez Zayas.