CAMAGÜEY.- La educación especial en la provincia rabaja en el actual curso escolar con su cobertura docente al ciento por ciento, luego de la incorporación de 51 maestros y especialistas, al aprobarse por el Gobierno cubano el aumento salarial.

El claustro de 432 docentes atiende una matrícula de mil 614 alumnos, en casi una treintena de instituciones educativas adonde acuden niños con diferentes diagnósticos.

Además, existen tres hogares para infantes sin amparo familiar y una Escuela de Formación Integral para Jóvenes.

Mabel Álvarez Bernal, jefa del departamento de educación especial en el territorio, explicó a la Agencia Cubana de Noticias que la cobertura docente siempre ha sido favorable en este tipo de enseñanza, pero en el actual periodo lectivo lograron completarla tras el incremento de los salarios, muy beneficiosos para todos.

Mencionó cómo implementan el perfeccionamiento del sistema nacional mediante la experimentación de un grupo de programas y orientaciones metodológicas, y la temporalización de los contenidos de acuerdo a las características de este nivel, los cuales se aplican en la escuela Nguyen Van Troi, ubicada en la capital provincial.

La funcionaria se refirió igualmente a la continua preparación de profesionales en la Escuela Pedagógica Nicolás Guillén y en la Universidad de Camagüey, teniendo en cuenta que otra de las aristas de su labor es como segundos maestros en otras enseñanzas donde existen niños en condiciones de inclusión, o sea, que tienen posibilidades de incorporarse a la vida laboral y social.

Camagüey cuenta con 602 niños y jóvenes en condiciones de inclusión, desde la primera infancia hasta la enseñanza técnico-profesional, que son atendidos por 24 maestros de apoyo, quienes tienen la misión de asesorar a docentes y directivos de los centros mencionados.

Una vez finalizados los estudios, los egresados se preparan en talleres, y los que adquieren habilidades pueden acogerse a la vida laboral con garantía de empleo por parte del Ministerio de Trabajo, para lo cual es necesario que haya vencido el noveno grado y tenga 18 años de edad.

El resto de los educandos que no adquieren las habilidades referidas reciben atención en el seno familiar, precisó.

No menos valor le conceden al trabajo preventivo y al ideológico, pues son eslabones fundamentales del sistema de enseñanza, acotó Álvarez.

El curso anterior se incorporaron a la vida laboral en el territorio camagüeyano 52 muchachos, con el seguimiento adecuado donde fueron ubicados ya bien en los centros de producción y servicio o en el trabajo por cuenta propia, y en el actual calendario escolar prevén incorporar 47.

Devenida la principal meta del personal que se desempeña en la educación especial, la integración de estos niños y jóvenes a la sociedad cuenta con el respaldo de las autoridades y los organismos implicados, entre ellos las direcciones de trabajo y seguridad social a instancia municipal y provincial.