El Ballet de Camagüey estrenó por su aniversario 55 la suite de El Cascanueces. Era un sueño que ahora ensancha su significación en nuestro contexto porque la obra enseña un camino para perder el miedo e insiste en el afecto entre seres queridos. La compañía, como familia, está llena de matices, pero su diversidad confluye en la pasión por la danza.