Justicia social, participación popular, desvelo por los segmentos poblacionales en situación de vulnerabilidad, sacrificios individuales en pos del bien común, compromiso y voluntad de la mayoría del pueblo, se reiteran al hablar de nuevas leyes; de la situación económica agravada por las agresiones imperialistas; de la campaña de desestabilización que se paga desde afuera y atiza malestares desde adentro. Hoy no podemos mirar ninguno de esos temas sin recurrir a los demás; mucho menos sin convencernos de que al centro de tantos conflictos, sufriéndolos, pero también con las fortalezas para superarlos, estamos nosotros, la gente, el pueblo, la ciudadanía.