CAMAGÜEY.- No hay que esperar la proximidad de los meses finales del calendario para engrosar lo que debe ser un hábito, desde el primero hasta el último día del año, el ejercicio del control interno que, de marchar bien, sin esquematismos, posibilita a las entidades salir a flote frente a los tropiezos del quehacer laboral.
La guía de autocontrol, elaborada por la Contraloría General de la República, no constituye una camisa de fuerza o una varita mágica, pero sí es una brújula para las direcciones administrativas en el camino de adecuarlas a las especificadas de cada lugar. Donde esa máxima se aplica los resultados para bien no se hacen esperar.
En Camagüey, como en el resto del país, está en marcha la XV Comprobación Nacional, cuya culminación se prevé para el 30 de octubre, después de dedicar las dos primeras semanas a la familiarización del trabajo y para que los auditores conocieran las particularidades de las 14 entidades escogidas como muestra en la provincia.
No es secreto que en los días transcurridos, hasta la fecha, se han detectado hallazgos que pasarán a la etapa final de elaboración de informes a analizar en los consejos de dirección y llevados luego a los colectivos de trabajadores como información, de aciertos y desaciertos.
En conversación con Adelante, el contralor jefe en la provincia, Miguel Catalá Borges, específico que en relación con el cumplimiento de los planes de exportación se detectan incumplimientos significativos de los planes y la devolución de productos terminados con falta de calidad para la comercialización en el mercado, asunto en el que se profundizan las causas, no ausentes de razones objetivas.
Por ejemplo, hay entidades con materias primas almacenadas, sin consumarse su ejecución final por falta de envases, aunque se buscan alternativas fuera del territorio para hallar la solución definitiva y llevarla a escala comercial.
No escapa al análisis, las empresas con pérdidas, la revisión de sus cuentas por cobrar y pagar, más la gestión que se realiza en ese sentido, no para hacer críticas, sino para encauzar soluciones, siempre a la vista de un tercero.
En cuanto al perfeccionamiento de la Empresa Estatal Socialista, no se logra en todos los casos sacar provecho de las 43 medidas aprobadas por el Gobierno.
El uso del combustible es un tema complementario de la comprobación y tiene la particularidad de evaluarse independiente a la auditoría, con calificación de aceptable, satisfactorio, deficiente o nulo. La entidad que no apruebe el tema energético influye negativamente en el resultado del ejercicio de control interno.
Lo anterior va acompañado de penalización por parte del Ministerio de Economía y Planificación, acompañada de una reducción del combustible en un 50% para el área administrativa. Solo se restablecerá siempre que hayan sido resueltos los problemas.
En el control interno de la provincia se aprecia discretos avances, no sustanciales, de ahí que la mirada en este campo debe ser proactiva y de reflexión.