CAMAGÜEY.- Con la inauguración del busto de bronce del destacado héroe de la Revolución Cubana, Jesús Suárez Gayol, en el céntrico Parque Enrique José Varona, quedó saldada una vieja deuda con el pueblo de Camagüey y la historia nacional.
La escultura del connotado luchador de la clandestinidad, del Ejército Rebelde y de la guerrilla del Che, quedó desvelada a manos del primer secretario del Partido, en la provincia, Federico Hernández Hernández, la Gobernadora, en el territorio, Yoseily Góngora López, y una representación de sus compañeros de estudios y de armas, los mayores impulsores del tributo.
Lleno de emoción, el combatiente, Antonio Fontes Carvajo, agradeció a “la Oficina del Historiador de la Ciudad de Camagüey (OHCC) y a todos los que han posibilitado este sueño, convertido en realidad”. Remarcó, además, el simbolismo de la figura “con pose victoriosa”, en un espacio de continuo tránsito, en especial, para las nuevas generaciones de cubanos.
“Era fiestero, jaranero, muy enamorado… pero sobre todo tenía un sentido de la justicia muy grande. Cuando había que enfrentar a la policía batistiana, siempre estaba en la primera línea. No le importaba recibir golpes si de defender a sus colegas se trataba. El ideario del nuestro Héroe Nacional, José Martí, también resultaba una pauta a seguir para él”, refirió del mártir, su amigo Felipe Avilés Cosío.
Roberto Estrada Alonso, autor de la obra, expresa que quiso captar no solo las semejanzas físicas, sino también las sicológicas de El Rubio, inmortalizado por él bajo la estampa de capitán de las filas rebeldes.
Dijo el artista que a partir de algunos de los comentarios de sus allegados supo “que no le gustaba abrocharse el último botón de la camisa, y siempre andaba con la boina un poco hacia atrás, como mismo se puede apreciar en la creación. Lo confeccioné con un hombro más alto que otro y la boca entreabierta para aportarle un poco más de vida, de movimiento y para acercarme a su espíritu impetuoso, explosivo y valiente”.
El busto, de 90 centímetros de alto, sobre un pedestal de dos metros, se encuentra enclavado frente al Preuniversitario Álvaro Morell, antiguo Instituto de Segunda Enseñanza, donde Suárez Gayol compartiera los ideales libertarios con varios jóvenes de aquel entonces. Desde ese lugar, partían marchas y mítines, que en múltiples ocasiones él encabezó, con dirección al centro de la ciudad. Por esa razón la mirada de Gayol, llena de gloria, apunta hacia ese lado del pueblo, como iluminando siempre a su gente.
Durante la inauguración, efectuada en el contexto del Día de todos los mártires de la Revolución Cubana y del asesinato del líder del 26 de Julio, Frank País, estuvieron presentes además, el director de la OHCC, José Rodríguez Barreras, la directiva de Cultura Provincial, Tamira González Jiménez, el presidente de la Asociación de Combatientes de la Revolución Cubana, de esta región, Julio Chong Blanco, estudiantes, entre otras instituciones e invitados.