CAMAGÜEY.- A partir de una mejoría en la situación epidemiológica de la provincia y una disminución sustancial de los casos positivos, sospechosos y contactos ingresados en instituciones hospitalarias, el sistema de salud reabre un grupo de servicios que se postergaron durante todo el enfrentamiento a la COVID-19 y reordena otros que se movieron de sus sitios habituales.
Entre los más sensibles está la atención oncológica, el hospital María Curié comenzó a recibir ingresos desde este martes pacientes que requieren ingreso para sus tratamientos, que aunque no se dejaron de hacer, por ejemplo como la quimio y la radio terapias, ahora lo harán internados en la propia institución. Este miércoles iniciarán también las intervenciones quirúrgicas, de acuerdo a la disponibilidad de medicamentos que existe y se priorizarán aquellos casos que su condición lo requiera.
Mientras que el Manuel Ascunce no estará a plena capacidad en sus salones de operaciones por limitaciones de recursos y por ese mismo motivo tampoco iniciará el servicio oftalmológico, sí se reactivan las consultas de sombras pulmonares y el servicio de cardiología, limitado también por la permanencia de casos positivos ingresados en áreas del cardiocentro, precisó el doctor Humberto González Duarte, jefe de la sección de Hospitales de la Dirección Provincial de Salud, y añadió que todos los centros devueltos a sus actividades normales pasaron un fuerte proceso de desinfección.
Mientras que el Materno, que nunca suspendió su labor asistencial, abrió las consultas externas y se mantendrá el área del Centenario para la atención a gestantes y puérperas positivas. Cifras que han disminuido considerablemente en los últimos días.
Trascendió también que para la atención a pacientes con COVID-19 solamente quedarán el hospital Amalia Simoni y el Hospital Militar, ambos en la ciudad. Así mismo, la doctora Lorena Reitor Landrían, subdirectora de asistencia médica de la provincia, explicó que asegurando el flujo y el estricto cumplimiento de las normas de bioseguridad, en los cuatro hospitales municipales se dejará un número de camas destinado a la atención a positivos y sospechosos. El Amalia también retomó, hace una semana, la atención a casos de dengue en la extensión hospitalaria de la Vocacional. Los casos febriles en edad pediátrica se ingresan, desde la semana pasada, en el Palacio de Pioneros Camilo Cienfuegos. Actualmente hay una disponibilidad de 68 camas para niños y adolescentes positivos y sospechosos.
Además, la atención primaria jugará un rol determinante en la nueva etapa, donde se reforzará la pesquisa para garantizar la detección temprana de signos y síntomas del SARS-CoV-2. Se revitalizarán otros servicios de ese nivel y se le prestará especial cuidado al estado constructivo de los consultorios, eslabón fundamental de la atención primaria.
Según explicó la doctora Sonia María González Vega, jefa de la atención primaria, el programa también tendrá especial responsabilidad con el seguimiento a los pacientes convalecientes de COVID-19. González Vega añadió que en la medida que la provincia se acerque al 95% de la población inmunizada disminuirá la incidencia del virus todavía más. Ya el 92% de los camagüeyanos tiene al menos una dosis de vacunas y el 69% completó ya el esquema de vacunación.
Por su parte, Carlos Morán Giraldo, director provincial de salud, insistió en la disciplina que debe tener la población ante el proceso de apertura que se dará en la sociedad, “es en las colas de las epidemias donde el exceso de confianza puede revertir el control sobre la enfermedad, por eso es tan importante mantener las medidas que nos han traído hasta aquí”, sentenció.
En la provincia se llegaron a tener 79 centros de aislamiento que en correspondencia con la tasa de cada territorio, han ido disminuyendo, motivado también porque al empezar el curso escolar, muchos de estos sitios retornan a sus funciones habituales. Todo ha sido parte de un proceso gradual que permitirá la incorporación de nuevos servicios a la atención médica en el territorio sin descuidar enfermedades como la COVID-19 y el dengue.