CAMAGÜEY.- La empacadora Raúl Cepero Bonilla afianza sus producciones de alimentos para la canasta básica, los mercados Ideal y las entregas al sector turístico, fundamentalmente ahumados, aseguró Milenes Rodríguez Suárez, directora de esta planta, ubicada a las afueras de la ciudad, en la carretera que conduce desde esta urbe a Santa Cruz del Sur.
En los años de Revolución, la industria se ha transformado para bien y la conmemoración centenaria sirve de soporte para impulsar mejoras, como la reparación completa del obsolescente matadero, donde se sacrifican los animales, proceso constructivo previsto para terminar a principios de septiembre.
La carpeta de productos llega a 68, entre divisa y moneda nacional, con la aparición de nuevos surtidos como chorizo, morcilla y la butifarra, todos comercializados con el nombre de Tinajón.
El mayor desafío de cara al futuro, primeramente, es tener una industria con todas las condiciones constructivas “que anhelamos porque hemos avanzado, el personal posee conocimientos y se han incorporado nuevas tecnologías, aunque trabajamos con otras de muchos años de explotación, con la ayuda de nuestros innovadores”, dijo Rodríguez Suárez.
La industria procesa los cerdos.
La estabilización de carne vacuna y de cerdo, materia prima proveniente de la agricultura, favorece el cumplimiento de los planes que cerró en julio, con un acumulado del 109%, refirió la fuente y especificó que en el encargo estatal registra el 112.
Se prevé que en septiembre el colectivo de la empacadora, camino a cumplir los cien años de fundada el próximo 4 de abril, reciba la condición de Vanguardia Nacional.