CAMAGÜEY.- La presencia de los ideales de nuestro Héroe Nacional, José Martí Pérez, en la Asamblea de Jimaguayú, fue uno de los temas fundamentales de la conferencia del historiador, Avelino Fernández Espert, en homenaje a ese suceso, celebrado del 13 al 16 de septiembre de 1895, en el territorio de Camagüey.

Desde la Casa de la Memoria, sede de la Unión de Historiadores de Cuba (Unhic), y la Sociedad Cultural José Martí (SCJM), el especialista habló de los antecedentes a la reunión, que pretendía como máximo objetivo alcanzar la unidad de las tropas mambisas. Destacó, entre otros aspectos, los esfuerzos de Martí en la unificación del exilio, con las labores del Partido Revolucionario Cubano y los debates en La Mejorana entre los máximos dirigentes de la contienda.

Foto: Del autorFoto: Del autor

“En Jimaguayú hubo una tesis militarista, otra, propugnada por los allegados a José Martí, que perseguía el equilibrio entre los mandos, y luego se sumó el postulado del democratismo a la usanza de la Guerra de los Diez Años. Aunque hay artículos dudosos y ambiguos como el 4, en el 17 se aprecia un avance en esta carta magna cuando postula que la dirección de la guerra estaría en manos del General en Jefe”, apuntó Fernández Espert.

Refirió el conocedor que el pensamiento de “El Maestro no podía ignorarse en aquella reunión. Su deseo de una campaña de poca extensión se hallaba presente en otro de los acápites, que reza sobre la constitución de un nuevo gabinete si en el plazo de dos años no había concluido la guerra. Martí quería una forma de gobierno sencilla, útil y breve”.

Avelino Fernández citó a la reconocida historiadora, Elda Cento Gómez, quien habló de la eficacia de la Asamblea de Jimaguayú, con el balance entre los poderes civil y militar, y la repercusión que trajo en el curso de la Guerra Necesaria, contra las huestes españolas. Hubo una Constitución parecida a la de Guáimaro, conformada por un Consejo de Gobierno que estaba compuesto por el presidente, Salvador Cisneros Betancourt, un vicepresidente y 4 secretarios, esta vez más práctica y enfocada en diseminar el fantasma de las desunión en los campos de Cuba.