CAMAGÜEY.- No se puede dar mucho por seguro en torno a los Juegos Olímpicos de Tokio después de aplazados por la COVID-19. Pero sí a que habrá dos camagüeyanos en la línea de salida de la pista de atletismo del Estadio Olímpico. Rose Mary Almanza (A) ya tiene boleto a la capital japonesa al rebajar la marca exigida para los 800 metros (m) de 1.59.00 minutos, mientras Roberto Skyers (S), entre los relevistas cortos, debe apuntarse al viaje cuando reinicie el calendario clasificatorio.

Ambos comenzaban la temporada 2020 cuando la pandemia cerró los estadios.Esta semana regresaron al óvalo en el “Rafael Fortún”, de nuestra ciudad, y compartieron sensaciones con Adelante.

“Lo más importante ha sido mantenernos saludables, aunque me desesperaba tanto encierro”, suspiró Rose Mary tras un trote sobre la superficie de polytan. “La Bala de Minas” se mostró pletórico de energías: “tengo unas libritas que quemar”.

Los principales representantes de la pista camagüeyana en la última década realizan secciones simples con la supervisión de Leslie Llorente, preparador físico del equipo nacional, quien también pasa los días en su tierra natal. El diálogo arrancó en la llegada de la enfermedad al país.

Foto: Leandro Pérez Pérez/AdelanteFoto: Leandro Pérez Pérez/AdelanteA: “Empecé a correr en marzo y logré tres buenas carreras de 800 m antes del aislamiento social, una de 1.58.92 minutos. Antes entrené en Guatemala y ya estaba lista para competencias internacionales”.

S: “Solo corrí hasta ese momento los 100 y el relevo, con muy buenos tiempos. Hice 10.18 segundos, nada mal para el inicio de año. Correspondía subir las cargas y en el relevo nos encontrábamos en el número 16 del ranking mundial. Me veía con posibilidades de incluirme en el programa individual de 100 y 200”.

Entre quienes más han padecido la “cuarentena” están los adictos a la actividad física. A ellos dos los hogares se les estrechaban y solo aliviaban los trotes antes del amanecer. Mas reconocen lo beneficioso de la circunstancia.

Foto: Leandro Pérez Pérez/AdelanteFoto: Leandro Pérez Pérez/AdelanteS: “Aproveché para meditar mucho. Me di cuenta de que llevaba cinco o seis años dentro de una burbuja donde solo existía el atletismo, y su dinámica no me permitía analizar las cosas con calma. Junto a mis seres queridos he trazado nuevas metas personales y deportivas. Gracias a eso veo mi carrera desde otra perspectiva. Me siento más maduro para regresar a la pista”.

A: “Llevaba años sin pasar un tiempo en familia. He entrenado en casa con mucha alegría y el calor de mi gente y recién comenzamos a realizar rutinas personales cumpliendo las medidas sanitarias. Sigo enfocada en mi meta. No me desmotiva el aplazamiento de todo”.

Los temores de entrar en un estancamiento les asediaron por instantes, pero el talento se potenció nuevamente por cambios técnicos y psicológicos.

S: “Tengo que agradecer la confianza de Yipsi Moreno, quien apoyó la estrategia de disminuir mi exigencia competitiva para lograr resultados puntuales. Me ayudó a mantenerme alejado de lesiones y logré buenas marcas, incluyendo el récord nacional que igualé en el 2019. Al comenzar José Alberto Sánchez a entrenarme nos propusimos trabajar seis meses como si fueran los últimos de mi carrera. Esa meta psicológica me ayudó a salir de una zona de comodidad a la que había llegado por no tener muchos rivales en Cuba”.

A: “Las medallas en Centroamericanos y Panamericanos fueron fruto del sudor de mi colectivo y de la madurez competitiva. Luego realicé modificaciones en los planes tácticos y en la estructura de la carrera. Con mi nuevo entrenador Francisco Ayala, alteramos el ritmo en los tramos finales. A partir de los 300 metros aumento el paso y obtengo resultados muy favorables. Las carreras lentas no me ayudan, trabajamos en mantener la intensidad”.

Pisar el óvalo sintético les provoca una indefinible sonrisa. Retoman el paso con una misma añoranza.

A: “Son mis terceras Olimpíadas, quizá las últimas, y no iré a perder el tiempo. Participar significa una conquista, pero quiero dar las dos vueltas en la final. Al extenderse el plazo gané tiempo para eliminar deficiencias y probarme ante las principales rivales. Ahora solo pienso en Tokio”.

S: “Por lo mucho que me cuesta mantenerme sano, pensaba acabar en los Juegos Olímpicos, pero ahora el ciclo se reduce y en el 2022 tendremos centrocaribeños. Intentaré seguir, según lo que logremos en Japón. Luego aportaré mi experiencia en los relevos y daré batalla a los muchachos en ascenso para que sean mejores que yo”.

A los 27 años, el palmarés de Almanza está entre los mejores de la historia de Cuba y América con marca personal de 1.57.70 m, podios en centroamericanos y panamericanos y varias finales mundiales. Skyers, con 28 calendarios, acompaña a Silvio Leonard como recordista nacional del hectómetro con 9.98 s y ha sido rey de la velocidad en citas multidisciplinarias regionales y continentales. Ninguno termina aún, solo miran al siguiente paso.