SANTA CRUZ DEL SUR, CAMAGÜEY.- La responsabilidad de los núcleos en los resultados económicos de las empresas, industrias y bases productivas centró el análisis de la asamblea municipal del Partido Comunista de Cuba, en un territorio con una vida económica caracterizada por las producciones agropecuarias y cañera, así como por la pesca de plataforma y el cultivo del camarón, con un impacto directo en las exportaciones de la provincia.

Magalis Cabrera Basulto, secretaria del núcleo de la UEB El Prado, reconoció que falta exigencia de las organizaciones de base en el cumplimiento de la actividad fundamental, sobre todo en aquellas que no logran un crecimiento sostenido de sus indicadores económicos, algo que todavía se debate con superficialidad en las reuniones ordinarias.

“Nos falta mucho por hacer, hay que darles tarea a los militantes y controlarlas, porque el Partido no es nacional es en la base y lo dirigimos nosotros, mientras no interpretemos eso no vamos a avanzar”, dijo Ariel Acosta, secretario del núcleo de la CCS Cándido González, que a su vez se refirió al impacto positivo en la motivación de los productores que han tenido las 63 medidas aprobadas para el desarrollo agropecuario.

Muy claro estuvo el planteamiento de Luis Yero, representante partidista de otra de las bases productivas del territorio, cuando explicó que las unidades productoras tienen que cumplir para que la empresa pueda salir adelante, en ese escenario hay que acercarse más a las direcciones administrativas y discutir con profundidad en el escenario del núcleo.

Alberto Gómez, secretario del comité del Partido de UEB Cultisur, explicó como para crecer primero tuvieron que fortalecer la Unión de Jóvenes Comunistas, “hoy tenemos núcleos en todas las áreas claves para la producción. Incluso como núcleos hemos discutidos con nuestra dirección nacional las cuestiones que nos afectan directamente, pero para eso hacen falta núcleos fortalecidos”.

Ariel Santana Santiesteban, primer secretario del Partido en la provincia, insistió en la importancia de cumplir los planes, porque eso se traduce en el cumplimiento del compromiso de cada una de las entidades con el territorio y la provincia. También pidió un reconocimiento especial de la Asamblea de Balance al sector de la salud, pues el territorio enfrentó elevados índices de contagio, dentro de los peores del país, y con la dedicación de sus profesionales logró revertir el desfavorable escenario.

Gaspar Rodríguez, de Episur, resaltó que a pesar de tener una flota envejecida, los planes se encuentran entre un 80 y un 90%. “Además, hemos diversificado nuestras ventas al punto que hoy asumimos una red 13 pescaderías, pero en todo ese esfuerzo ha sido determinante el empuje de los militantes, que tenemos el esfuerzo que se hace para sacar adelante la Empresa en esas condiciones.

En ese sentido, Rafael Núñez Garriga, funcionario del Comité Central del Partido, enfatizó que el núcleo no es solo el secretario general, para que funcione bien todos tienen que aportar y a su vez llamó a separar los problemas objetivos de los subjetivos y a resolver los que dependen de los militantes.

Para el doctor Manuel Loyola, de la dirección municipal de Salud, ha faltado sistematicidad y ejemplaridad de la militancia, “muchas veces le pasamos por delante al problema y lo dejamos allí, no tratamos de resolverlo y eso no lo puede hacer un militante del Partido”. En este mismo sector Josefa López, secretaria del núcleo del Hospital Municipal, señaló que faltó trabajo con la política de cuadro y la preparación de las reservas, evidenciado en el pico pandémico generado por la COVID-19, donde muchos de los cuadros enfermaron y no tenían previsto a quién dejar y los que asumieron lo hicieron sin la debida preparación.

A cambiar métodos y estilos en el trabajo político ideológico, fue el llamado de Idelys Peña, primera secretaria del comité municipal de la Unión de Jóvenes Comunistas, “durante los procesos Somos Continuidad hemos identificado jóvenes valiosos y con disposición para integrar las filas del Partido sin embargo no están identificados por los núcleos y tampoco se le dan tareas para que conozcan que hace un militante del PCC. A esa misma dificultad se refirió Antonio Fernández, del Inder municipal, quien apuntó que los jóvenes no quieren pertenecer ni se sienten identificado con aquellas organizaciones de base que esconden los problemas o que les critique porque se pinta el pelo sin saber cómo piensan.

El miembro del buró provincial del Partido, Jorge Enrique Sutil Sarabia, resaltó que todo tiene una relación, “porque para que ese joven crea en el sistema que construimos y le interese ser militante primero hay que desarrollar la economía en el territorio que haga que esos muchachos vean posibles sus proyectos de vida aquí y no fuera del municipio”. Por allí comienza el buen trabajo político, en que las cosas cotidianas se hagan bien.

Para la nueva etapa de trabajo se eligió un nuevo comité municipal del Partido, renovado en 40 de sus 45 miembros, al frente del cual fue ratificado, como su primer secretario Juan Isnel Hernández Digón.

Aurelio Fumero Sosa, también miembro del buró provincial del PCC, al concluir la Asamblea ratificó la confianza en el pueblo santacruceño para echar adelante los principales indicadores del municipio, principalmente en el autoabastecimiento territorial, aumentar las exportaciones, la producción de alimentos y la siembra de caña, fundamentales para la economía de toda la provincia y en su cumplimiento es necesario el rol activo de los núcleos, señalando y acompañando con exigencia y ejemplaridad.

Buró del Partido:

  • Odelkis Cervera Rodríguez, política-ideológica.
  • Aloyma Torriente Jackson, esfera educación, salud, transporte y construcción.
  • Selín Morales Labrada, esfera agroalimentaria.