CAMAGÜEY.- Dicen que en Los Macutos, a 40 kilómetros de Santa Cruz del Sur, el diablo dio tres gritos y nadie lo escuchó, pero ello no justifica que allí los productores de maní anden sueltos y sin vacunar, como refiere el argot popular, y establezcan una anarquía con los precios.
La sospecha de que algunos problemas ocurrían en el lugar afloró días después de publicar en la edición impresa del periódico Adelante el reportaje Precios al vaivén del tiempo.
Vía electrónica, Miguel Ángel Roselló Villafaña, fue al grano, no del maní, sino acerca de los entuertos que rodean los altos precios para la adquisición de esa materia prima, vital en la elaboración de las famosas cremas que produce, con tradición de más de siete décadas en el mercado.
Él puede optar por comprar la libra de maní al precio que se la vendan. Sin embargo, “¿A qué precio tengo que vender la crema al cliente?”
En 1928 el músico cubano Moisés Simons compuso el son-pregón El Manicero, popularizado por Rita Montaner, letra que llega hasta nuestros días al igual que el grano procesado en forma de dulce, que lanzó al mercado el padre de Miguel Ángel quince años después, con la marca comercial Roselló sujeta a regulaciones de la Oficina Cubana de Propiedad Industrial y autorizada, por sus estándares de calidad, a vender, incluso, fuera de nuestra frontera.
La comparecencia de Roselló ante el Consejo de Gobierno Provincial lo llenó de optimismo al aprobarse en ese órgano, el 9 de diciembre del 2020 la propuesta de su negocio como Proyecto de Desarrollo Local (PDL).
En el establecimiento de este modelo de gestión, que busca potenciar el desarrollo en los municipios y lograr encadenamientos productivos, Camagüey posee experiencia como el de los buzos en Nuevitas, establecido en el 2014.
El de ese norteño territorio ha sentado pautas tras vencer escollos iniciales y transformarse en un baluarte de la economía, no solo en ese municipio sino en diferentes lugares del país donde sus integrantes han prestado servicios.
Documentos en poder de Roselló atestiguan que los Papa Juan Pablo II y Benedicto XVI han degustado este tradicional producto camagüeyano, al igual que otras personalidades extranjeras y cubanas.
MÁS QUE EXPLICACIONES FALTAN SOLUCIONES
Mas, el embullo no es suficiente para llevar a feliz término la concreción del PDL, tiene que estar acompañado de medidas organizativas y de control antes, durante y después de ponerse en marcha el proyecto.
No basta que una entidad lo represente, en este caso, la Unidad Empresarial de Base Frutas Selectas, sino que funcionen en sistema todos los engranajes, incluidos los encargados de supervisar el cumplimiento de la tarea; que se entienda que incumbe a todos, desde los que están en el surco hasta los encargados de la producción y la comercialización.
La conversación con Amalia Rodríguez Rojas, subdelegada municipal de la agricultura santacruceña, permitió actualizar la situación de los cosechadores de maní en esa región del sur de la provincia.
“Hemos disminuido. Ahora tenemos unos 38”, dijo y la pregunta no tardó: ¿Anteriormente no contaban con 85? “Sí, el problema es que AzCuba no estuvo de acuerdo que en sus áreas continuaran sembrando maní, a partir de que muchos de los agricultores explotaban la tierra de manera ilegal”.
A lo anterior se sumó que hace dos años no se realizaba el balance de áreas ociosas, lo que ha impedido dar curso a la legalización sobre la posesión de la tierra. De más de 500 hectáreas mermó a 350, informó la fuente.
Al decir de Amalia y de Vladimir Arnay Ramos, director aquí de Frutas Selectas, se tejen profundas contradicciones, salvables si se dictaminan los productores que asegurarán la materia prima, su calidad y los plazos de entrega, para que el codiciado grano no continúe transitando por la izquierda, como dijeron varios entrevistados, sin que se frene su desvío y pare en manos del mejor postor.
Esa formalización, de la que se adolece, limita cumplir el acuerdo de la visita gubernamental, de junio del 2019, encabezada por el presidente Miguel Díaz-Canel Bermúdez: “Impulsar la producción de maní con destino al turismo y convertirlo en un renglón exportable”.
No es hora del recuento, de hablar de 200 quintales contratados en la zona de la UBPC Macuto Cuatro con Frutas Selectas ni del incumplimiento del compromiso de los diez quintales para la producción de turrones navideños de diciembre del 2020 que nunca aparecieron.
Hay que pensar, por ejemplo, en vencer trabas que no dependen de Frutas Selectas de Camagüey, sino de la empresa nacional para hacer efectiva la cuenta bancaria y proceder a las operaciones financieras.
Habría que revisar, también, el tope de los precios. El equipo de Adelante contactó con medios de prensa en distintas provincias y conoció que mientras en Camagüey es 37.00 pesos, en Las Tunas se fijó en 35.00; en Sancti Spíritus, 30.00; en Villa Clara, 21.00; en Holguín, 20.00; y en Matanzas, 7.00.
La oportunidad de que Miguel Ángel Roselló asegure maní en diferentes formatos para el consumo de los hoteles del país y en el mercado interno, más otro producto como la mantequilla de maní, no debe de perderse. Se conocen varios intentos de falsear la marca, pero el secreto del know-how (saber-hacer) del maní lo tiene Miguel Ángel, defendido por él para no traicionar la memoria de su padre, que prevalezca la tradición satisfacer las necesidades de los clientes y el aporte económico que representa individual y colectivamente.
Lo sucedido con este proyecto no empaña las acciones de capacitación y asesoramiento ofrecidas por la Universidad de Camagüey Ignacio Agramonte desde antes del 2014, que mantiene con los grupos municipales encargados de promover los PDL, liderados por los gobiernos locales, aunque no todas las demarcaciones han marchado de la misma manera.
En reciente visita a Camagüey, Salvador Valdés Mesa, vicepresidente de la República, esbozó ideas cardinales sobre el desarrollo local, como que debe articularse con los programas que impulsa el país, sobre todo, los que influyen en la propia demarcación, pero que no se trata de independencia, sino de autonomía municipal, de impulsar las potencialidades endógenas.
Elementos básicos para la producción local de maní
-El maní puede sembrarse desde abril a septiembre siendo mayo el mejor mes, pues se aprovecha la época de lluvia en el desarrollo del cultivo.-Las profundidades de siembra serán de 7-10 cm en suelos secantes y de 5-7 en suelos húmedos.
-La preparación del suelo se puede realizar con tracción animal o mecanizada. Tanto la aradura y pases de gradas deben garantizar que el suelo quede bien mezclado y sin restos de cosecha.
-En cuanto al riego las mayores necesidades de humedad del suelo se requieren en los momentos de la siembra, comienzo de la floración y durante el llenado del cacahuete.
- El cultivo debe cerrar limpio antes de la floración (entre 25-30 días).
-La cosecha se realiza mecanizada o manual. Se procede a realizar cuando el 95 % de las cápsulas presentan síntomas de madurez (cápsulas con manchas oscuras en la pared interior y las hojas se tornan amarillentas).
-Se conserva en cacahuetes limpios envasados en sacos de yute, ubicados a la sombra, en lugares frescos, secos. También pueden almacenarse en cámaras de los frigoríficos con mejores resultados.
-El rendimiento depende de la época de siembra, suelos, la variedad y atenciones dadas al cultivo, se logran obtener en cápsulas, de 1,2 a 1,5 t/ha respectivamente.
-Un quintal de maní rinde listo para la producción, limpio-tostado y descascarado, 85 libras.