CAMAGÜEY.- Apoyado en la efectividad de sus lanzadores, el equipo de Santiago de Cuba se puso a un paso de la semifinal de la 62 Serie Nacional de Béisbol al derrotar este jueves a Camagüey con pizarra de ocho carreras por dos.

El diestro Osvaldo Acuña tiró el juego de su vida en el estadio Cándido González, de esta ciudad, para que las Avispas tomaran la delantera en el compromiso tres triunfos por dos. Tanto fue su domino sobre la tanda taurina que hasta el octavo no admitió imparables, aunque en el séptimo le pisaron una vez el home plate producto de un boleto, un error y una jugada de selección.

Sus compañeros le dieron ventaja mínima en el segundo acto cuando Francisco Martínez negoció boleto, se robó la intermedia y anotó remolcado por sencillo de Euclides Pérez ante el diestro Ángel Luis Márquez, abridor de los anfitriones. El propio Martínez entraría con la segunda de los visitantes al pegar hit, participar en una jugada de doble robo y recibir flete de un inatrapable de Maikol Poll.

El duelo de serpentineros (ambos nacidos en el municipio San Luis) se mantuvo hasta el llamado inning de la suerte, cuando ambos conjuntos sumaron una. El mejor momento de los Toros llegó en el octavo, comenzando por el infield hit del emergente Adrián Hernández, que incluso tuvo reclamación de video.

Con el estreno de la casilla de los imparables Acuña abandonó el box y su relevo fue el también derecho Y Montero, quien soportó sencillos del emergente Michael Thompson y otro remolcador de Yanmichel Flores, pero la amenaza se enfrió en esa misma acción, cuando Thompson se pasó al deslizarse en tercera y fue puesto out.

Seguidamente Luis González entró en circulación, pero Alexander Ayala bateó para doble play ante un envío de Wilmer Reyna, que había entrado para aplacar la rebelión. El bajón anímico que provocó que se malograra la remontada tuvo efecto en el pitcheo, pues el cerrador Fernando Ramos fue castigado por los bateadores santiagueros en el noveno, al punto de que le fabricaran tres y otra a su relevo Mario Marzo que redondeó el marcador.

La infertilidad del núcleo duro de su batería ha condenado a Camagüey en sus últimas presentaciones, a lo que el manager Marino Luis no ha buscado alternativas. Para remontar en este fin de semana en el Guillermón Moncada los Toros necesitan retomar el juego chiquito y alegre que les caracterizó en el último tercio de la temporada regular.

Por otro lado, urge solucionar el problema en la receptoría, pues a Hubert Sánchez le salen al robo con total impunidad y casi siempre esos corredores terminan haciendo score. Mientras, los nuestros actúan estáticos e imprecisos en el recorrido por las almohadillas.

Para el primer duelo en la tierra caliente los nuestros dependerán del estelar José Ramón Rodríguez, por lo que podría repetirse el cara a cara contra Reyna. Al cierre de esta información medían fuerzas Industriales frente a Sancti Spíritus, subserie que favorece a los segundos 2-1, y Matanzas contra Artemisa, con ventaja 2-1 de los Cocodrilos.