CAMAGÜEY.- Con la épica de los equipos grandes, en el último suspiro, los Toros de la Llanura clasificaron a la postemporada de la 62 Serie Nacional de Béisbol.
Hubo que acudir al extra de un campeón, el zurdo Dariel Góngora, para sacar un triunfo frente a Ciego de Ávila en el último choque del calendario y concretar así el tan ansiado pase. Los Tigres nos había puesto contra la pared el pasado sábado 24 al apalear a Luis Mario Macías (perdedor), Riquelme Odelín y Rodolfo Sorís, un trío de lanzadores que en sus últimas salidas habían lucido bien.
Con el revés de cuatro carreras por siete se desinfló la esperanza camagüeyana hasta que esa misma noche Góngora pidió encaramarse en la lomita con solo tres días de descanso tras las nueve entradas que trabajó en la lechada del último duelo contra los Piratas.
Pocos habían reparado en que el zurdo solo había realizado 87 lanzamientos el jueves, pero aun así parecía mucho riesgo darle tamaña responsabilidad el domingo cuando se contaba con Ángel Luis Márquez fresco.
No obstante, fue tanta la determinación de Dariel, que el colectivo técnico se la jugó y la historia le dio la razón. "El Látigo" escribió un poema desde el box del Cándido González para consumar el éxito con pizarra de dos anotaciones por una. Solo seis imparables, uno de ellos el jonrón solitario del estelar Osvaldo Vázquez en el quinto inning, permitió en su gran tarde de cinco ponches sin boletos en otros nueve capítulos completos.
En el primer acto Luis González remolcó la primera de los locales, ventaja que se mantuvo hasta el empate del quinto, por lo que hubo que acudir nuevamente a ese salvavidas ofensivo llamado Leslie Anderson. Otra vez desde el banco, Lele salió iluminado para empujar la de la victoria en el sexto.
Con sus dos talismanes a la cabeza, los Toros consiguieron el triunfo 39 de la campaña que les aseguró pasaje a la fiesta grande, un objetivo que no debió costar tanto.
Con los ánimos más calmados, Adelante Digital conversó con el mentor agramontino Marino Luis sobre esta primera etapa y las proyecciones de cara a la postemporada.
"En las primeras subseries todo nos salió casi a la perfección en los principales departamentos de juego. Después tuvimos un amplio bache, con muchas derrotas, pero al final volvimos a levantar, de nuevo funcionamos como equipo y conseguimos el objetivo fundamental", resumió.
Camagüey es el conjunto con más novatos de la Serie, y a muchos de ellos les tocó asumir roles importantes, Marino tuvo elogios para ellos.
"Hay que reconocer la labor de los debutantes y de otros jóvenes con poca experiencia. Un gran ejemplo es Leonardo Casado, regular en una posición tan difícil y vital como el campo corto, siendo fundamental en varios triunfos".
"Los peloteros de más experiencia también jugaron un papel decisivo. En conjunto todo el equipo aportó", aseguró.
"Ya estamos enfocados en los play off, no sabemos quién es el contrario aun entre Las Tunas y Santiago de Cuba, pero estamos listos para lo que venga.
En estos días de entrenamiento iremos limando detalles y algunas deficiencias de la primera fase".
Aunque aun no se aventura a anunciar posibles abridores, sí reconoce que el pitcheo merece una reorganización.
"Tuvimos varias lesiones en los lanzadores y debemos evaluar los roles con el cuerpo técnico. Pensamos que Pepe se incorpore después de los Centroamericanos a la causa camagüeyana. Los muchachos han realizado una campaña de ensueño y merecen la felicitación".
Esto último lo tiene bien claro Federico Hernández Hernández, primer secretario del Partido Comunista de Cuba en la provincia, quien preparó este miércoles un encuentro con los Toros, para homenajearlos luego de cumplir con el compromiso pactado con la afición.
"Ya no importa quién clasificó primero o último, ahora todos están en igualdad de condiciones. El equipo tiene que tener muy claro que puede ser campeón, pero para serlo hay que creerlo primero", exhortó el dirigente.
En el acto, los beisbolistas conocieron a las entidades del territorio que apadrinarán al plantel, y recibieron reconocimientos de las direcciones provinciales de la Unión de Jóvenes Comunistas y la Central de Trabajadores de Cuba, esta última les otorgó su máxima distinción Por la Senda de Agramonte.