CAMAGÜEY.- A quienes por estos días se han asomado a las puertas del auditórium Iván Hidalgo Funes les asalta la duda sobre la categoría del certamen de voleibol que se desarrolla en su tabloncillo. Y es que los rostros y el físico de las jugadoras no le aseguran al espectador que presencia acciones del Campeonato Nacional de Voleibol Femenino de mayores.

Casi ninguna de las chicas de los seis elencos participantes supera los 23 años de edad, por lo que el nivel técnico no es el de otras veces. Sin embargo, no se trata de que este deporte haya bajado su calidad de la noche a la mañana, todo lo contrario. Resulta que en estos momentos más de 60 jugadoras criollas se encuentran cumpliendo contratos en el extranjero bajo el amparo de la Federación Cubana de Voleibol, por lo que le ha tocado a las menos experimentadas asumir la responsabilidad en este evento.

Según el camagüeyano Osvaldo Martínez, metodólogo nacional de este deporte, “aquí se está jugando con mucha entrega, defendiendo a cada provincia, y eso es algo que esas generaciones necesitaban. A causa de la pandemia y luego por los problemas económicos que ha padecido el país, estas muchachitas han transitado por la edad escolar y de cadetes con muy poco rodaje competitivo, por eso la realización de este evento era algo muy necesario”.

“Acá estamos moldeando el futuro, pues la mayoría de las participantes están en categorías inferiores que pronto convocarán a eventos internacionales. Varias de ellas, incluso, ya están siendo valoradas para recibir ofertas de clubes en Europa”, dijo el también Secretario General de la Federación.

Lo cierto es que, la pasión y el interés que ellas muestran en cada salida al rectángulo de juego

hace que se mire al futuro con esperanzas de glorias internacionales.

Al término de la primera vuelta por el sistema de todos contra todos, la selección de Pinar del Río comandaba la clasificación general. Desde el viernes y hasta mañana martes suceden los partidos de la segunda y definitoria ronda, en la que las camagüeyanas, discípulas de la experimentada Cándida Jiménez tendrán que jugar casi perfectas para superar al elenco occidental, que ha lucido mejor física y tácticamente.