CAMAGÜEY.- Después de una década ofreciendo la práctica deportiva a los niños y adolescentes del municipio de Camagüey como mejor opción para crecer sanos y felices, el proyecto Fútbol en los Barrios pasa a una fase superior como fenómeno social.
Al plan original del profesor Armando Cruz y sus colegas de la Dirección Municipal de Deportes y la organización no gubernamental suiza Camaquito, se ha sumado el empuje de varias entidades gubernamentales y organizaciones, lo que obligó a relanzar la iniciativa.
La Oficina del Historiador de la Ciudad (OHCC), las direcciones provinciales de Educación y Cultura y la Organización de Pioneros José Martí han oficializado su compromiso como contrapartes ejecutoras para contribuir a la formación sociocultural de los infantes. El más universal de los deportes es el elemento articulador para ocupar el tiempo libre de alrededor de 1 000 chicos en un proceso que nace en las escuelas y se materializa en campos de juego y escenarios históricos, culturales y recreativos de la urbe.
Por estos días Adelante visitó los terrenos donde se desarrolla la Copa Camaquito y el panorama que descubrimos, como sentenció el colega Osmany Torres, del programa Fútbol por Dentro del canal Tele Rebelde, es único en Cuba. Más de 50 entrenadores y técnicos se encargan de una organización impecable de los eventos de fin de semana en el que se involucran además alrededor de 3 000 familiares.
“Aunque todos los equipos luchan por la victoria en cada juego, nuestros profesores se enfocan en formarles valores a la par de los elementos técnicos. Lo más importante es que cada uno de ellos descubra las lecciones de vida que atesora el deporte y sean capaces de incorporarlas a su personalidad. Queremos que crezcan felices, fuertes, valientes y aprendan que la unidad y la solidaridad son lo más importante para avanzar como sociedad”, explica Cruz, Gloria Deportiva de Camagüey.
No obstante, el licenciado Agustín Luis, metodólogo municipal de la disciplina, reconoce que “los principales talentos que hemos captado para la EIDE Cerro Pelado en la última década han formado parte del proyecto. La formación como atletas es superior en el aspecto técnico-táctico y en la disciplina. Los principales ejemplos son Felipe Hurtado y Manuel Cruz, quienes transitaron la pirámide y hoy son matrícula de la preselección nacional”.
A simple vista se descubren jugadores con aptitud como Antony Coroneaux y Rolando Boedo Jr., hijos de dos de los mejores futbolistas agramontinos del último cuarto de siglo. Junto a ellos disfrutan de igual manera otros con menos cualidades atléticas, pero igual o superior entusiasmo y alegría. Este proyecto apuesta por la inclusión y la igualdad de género, como pudimos apreciar en el reparto Lenin.
Yaixa Osorio García tiene madera de estrella, sus compañeros de equipo buscan constantemente pasarle la pelota y ella responde con habilidad. “Desde bien pequeña disfrutaba el fútbol junto a su papá en la televisión y luego quiso jugar. Al inicio tuve temor a que jugara con los varones, pero desapareció con el tiempo porque ella se acopla a la dinámica del equipo sin problemas. Con el apoyo de los profesores ha pasado de ser muy tímida a crear buenas relaciones sociales. Nosotros la apoyamos porque vemos lo mucho que disfruta”, nos contó Yaima García Martínez, su mamá.
Lo que comienza a fraguarse en canchas de barrios tan distantes como el Micro de Planta Mecánica o Altagracia se consolida en la “Maqueta de la Ciudad”, la Casa de la Diversidad, la sede de la Asociación Hermanos Saíz o la casa de cultura Ignacio Agramonte Loynaz. Según Yahima Milanés, representante de la OHCC en el proyecto, “hace cuatro años decidimos involucrarnos por la necesidad de preservar los valores de la Plaza de El Carmen, que estaba en todo momento llena de niños jugando fútbol. Ahora tenemos la oportunidad para llegar a un mayor número de pequeños, ya no solo a los que viven en el Centro Histórico, para difundir nuestra misión, para contribuir a la educación ciudadana, para comprometerlos con el cuidado del patrimonio cultural”.
De esta manera, cada una de las contrapartes ejecutoras de Fútbol en los Barrios, un fenómeno social, busca aportar lo mejor de sus esencias al crecimiento físico y espiritual de los menores involucrados. La experiencia crece como un noble ejemplo dentro de la enseñanza deportiva y espera multiplicarse en varios municipios y a nivel de país, gracias al convenio que recientemente firmaron Camaquito y la Federación Cubana de Fútbol en Camagüey miles de niños y sus familias se beneficiarán en este programa; y el esfuerzo por anotar un gol en equipo será metáfora de lo que podrán lograr como sociedad en el futuro.