CAMAGÜEY .-El equipo camagüeyano de voleibol masculino,regresó al podio del Campeonato Nacional y ¡de qué manera!: con la medalla de oro, tras conseguir nueve triunfos en diez presentaciones en la sala polivalente Yayabo, de Sancti Spíritus.
Tras completar invictos la fase regular con siete éxitos al hilo y muy pocos sets en contra, los discípulos de Héctor Sarmiento comenzaron el pasado fin de semana la fase final ante los tres mejores elencos del país en los últimos años. El triunfo del viernes frente los titulares defensores de La Habana les puso a un paso del gran objetivo, pero el sábado Pinar del Río les plantó cara y los derrotó en tie-break para ponerle más suspenso al cierre.
No obstante, en la última jornada completaron el histórico resultado al barrer a Matanzas con parciales de 25-11, 25-22 y 25-17, guiados por el atacador auxiliar Hermes Quevedo. Además de Quevedo, destacaron durante todo el evento Yosvani González, Henry Pelayo y el pasador Adrián Chirino, pero la real fortaleza de este Camagüey resultó la armonía colectiva.
Precisamente los matanceros ocuparon el segundo puesto con siete juegos ganados y tres perdidos, mientras que en el choque que definió la medalla de bronce los pinareños superaron a los habaneros con marcadores de 25-22, 25-22 y 25-18, y los sacaron del podio. Los puestos cinco y seis de la tabla fueron para Santiago de Cuba y Cienfuegos, elencos que de esta manera aseguran su presencia en el próximo torneo nacional de primera categoría.
Hubo que esperar 32 años para que nuestra provincia, una de las principales plazas del deporte de la malla alta en el país, se coronara en la rama varonil y si miramos esta joven plantilla podemos deducir que se trata de un despertar que tiene sus bases el trabajo en municipios con gran tradición como Esmeralda y Florida. Y aunque es cierto que este año se ausentaron a la competencia las principales figuras del equipo Cuba, en la capital espirituana se reunió un talentoso grupo de jugadores que compone la reserva inmediata y cuyos nombres pueden sonar en el panorama internacional próximamente.
