CAMAGÜEY.- El guantanamero Arlen López se convirtió esta madrugada en bicampeón olímpico al derrotar al británico Benjamín Whittaker en la final de los 81 kilogramos y puso a Cuba de un golpe en el puesto 13 del medallero general por países de Tokio 2020.
Arlen representaba la única posibilidad de título para nuestra delegación en la duodécima jornada de los Juegos y cumplió con una clase táctica sobre el ring. La pelea se antojaba complicada por las características de Whittaker, un púgil ágil y de mucha más estatura y alcance, pero López supo imponer el ritmo y las distancias de la esgrima con mayor efectividad y sin caer en tentaciones de ataques desmedidos.
Así fue sacando clara ventaja durante los tres asaltos para convencer a todos los jueces menos al australiano Maksim Sulejmani, quien también fuese el único en ver perder a Julio César La Cruz en semifinales. Otro que estuvo todo el tiempo equivocado y probablemente desinformado sobre las votaciones por asaltos fue el peleador de la esquina roja, pues al sonar la campana final pensó que tenía la victoria. Pero lo cierto es que López se convirtió en el primer boxeador en coronarse en los pesos medianos y semicompletos bajo la sombra de los cinco aros.
Con esta presea nuestro país no solo ascendió en la tabla con cinco metales dorados, tres plateados y cuatro bronceados, sino que además superó la actuación de hace cinco años en Londres 2016, cuando acumulamos 5-2-4. Pero el éxito no se quedó entre las cuatro cuerdas, hubo más noticias alegres.
El canotaje sigue sorprendiendo a propios y extraños con sus resultados en el Canal Sea Forest de bahía tokiota. Hoy fueron las jovencitas Katherin Nuevo y Yarisleydis Cirilo quienes pusieron la buena nueva al clasificarse a semifinales en la canoa individual a 200 metros. Ambas entraron en el segundo puesto de sus respectivos heats eliminatorios, Nuevo con crono de 46.533 segundos y Cirilo con 47.267 segundos.
En la pista del Estadio Olímpico hubo una de cal y otra de arena, como suele decir el narrador Rodolfo García. Yorgelis Rodríguez en una enorme muestra de vergüenza deportiva insistió en salir a competir en el heptalón pese a estar lesionada, pero su dolencia no le permitió ni siquiera superar la segunda valla de la prueba de los 100 metros c/v. Las impactantes y emotivas imágenes de los asistentes médicos alzándola en brazos mientras lloraba, merecieron el reconocimiento de todos sus compañeros y del pueblo que a esa hora de la noche esperaba su debut.
No obstante, la felicidad cubana regresó al óvalo esta mañana con la sorprendente carrera de Roxana Gómez en una de las semifinales de los cuatrocientos metros planos. Roxana volvió a romper su mejor marca personal al bajar por primera vez de los 50 segundos (49.71 s), lo que le permitió acceder a la carrera por el cetro con el quinto mejor tiempo de la ronda. El fenomenal performance de la cienfueguera la convirtió en la segunda mujer que va a una final de esta prueba representando los colores de la bandera solitaria después que lo hiciera Aurelia Pentón en 1972, y además se inscribe como el segundo registro nacional de la historia, solo por detrás de los 49.61 segundos de Ana Fidelia Quirot.
Así cerró el día para nuestros atletas en unas olimpiadas que siguen comandadas por China con 32 preseas de oro, 22 de plata y 16 de bronce, seguida por Estados Unidos (25-31-23) y Japón (21-7-12). La Mayor de las Antillas es el país latinoamericano mejor ubicado hasta el momento y podría ampliar ese dominio en las próximas horas, pues hay criollos en finales en el atletismo. También subirán al colchón los luchadores del estilo libre Laura Herín, de Camagüey, y Geandris Garzón.