CAMAGÜEY.- La cifra de 1 417 pacientes confirmados con COVID-19 en el mes de mayo lo convirtió en el de más casos positivos desde el inicio de la pandemia, superando por casi 200 casos los reportados en marzo pasado. Lo que evidencia que la situación epidemiológica del territorio sigue siendo muy compleja.

Al respecto Juan Jesús Llambías Peláez, director del Centro Provincial de Higiene, Epidemiología y Microbiología, detalló que aunque el comportamiento de la epidemia refleja una meseta, los parámetros se han estabilizado sobre cifras muy altas, superando los 300 casos reportados por semana y se acumulan en este 2021 más de 4 500 enfermos de los que el 92 % ya se encuentra de alta clínica.

Siguen al alza los casos importados y mayo dejó casi 300 casos con fuente de infección en el extranjero de 590 casos que han llegado enfermos desde el exterior desde enero. Aunque se cumple el protocolo de aislamiento a su llegada a Cuba, siempre implica riesgos y recursos que hay que destinar para su atención.

El doctor recordó que en la mayoría de los reportes predomina la cepa sudafricana, que ha demostrado ser mucho más contagiosa que otras y esto se evidencia en las estadísticas de los últimos días. Añadió que de los 52 fallecimientos a causa de la pandemia en la provincia en lo que va de año, 24 fueron en mayo, lo que demuestra la letalidad y la alta virulencia que tiene la situación epidemiológica actual a la que se le suma un promedio, en las últimas jornadas, de 30 casos activos con edades menores a 18 años.

El municipio de mayor complejidad sigue siendo el cabecera con 176 focos activos y una tasa de incidencia de 120,9 x cada 100 000 habitantes, muy superior a la de 78,4 que presenta la provincia. Le siguen Vertientes y Minas aunque la tendencia en esos territorios es a disminuir el número de confirmados.