Periódico de la provincia cubana de Camagüey
¿Qué pasará si Miguel de Cervantes resucita? No creo que se ponga muy contento con lo que estamos haciendo los hispanohablantes con un idioma riquísimo, cuyo buen dominio exige horas y horas de estudio. De allí que resulte tan complejo para quienes no tienen el privilegio de tenerlo como lengua materna.
Mi pequeña sobrina, Carolina, llegó a este mundo hace apenas un año y tres meses. Corre por doquier, camina, explora, ríe, llora, toca, mira, rompe, baila y lo habla todo: “zapato, carro, mamá, papá…”