CAMAGÜEY.- El Programa de Atención Materno Infantil (PAMI) ha enfrentado todo tipo de retos, relacionados con el contexto sanitario del país y el resto del mundo en el transcurso del 2020, sin pasar por alto la repercusión económica que la COVID-19 ha provocado y en la falta de algunos recursos que debían arribar desde el exterior.
Tal apreciación fue dada a conocer por la Dra. Ivette Alicia Prince Martínez, jefa de la sección del Programa de Atención Materno Infantil (PAMI) en la provincia de Camagüey, especialista de 2do. grado en Pediatría y en Cuidados Intensivos y Emergencias y Profesora Auxiliar. La especialista, al frente de este programa aquí, explica que parte del propio personal de la Salud es especialmente vulnerables al SARS-CoV-2, unos por su años y enfermedades de base y otros han de asistir a sus familiares o dedicarse al cuidado de sus hijos pequeños.
“Esta situación, inesperada, además, nos obligó a reestructurar el personal para garantizar una asistencia médica de calidad, y durante los tres meses críticos hubo que cubrir tres áreas de Salud con personal dedicado a la pediatría y obstetricia que ofrecían sus servicios en la cabecera provincial. incluso, en otros municipios y en zonas de difícil acceso, que son aquellas complicadas para llegar, pero lo fundamental era, y se consiguió, que las embarazadas fueran seguidas por los especialistas.
“Con estas y otras estrategias —añadió la también Máster en Enfermedades Infecciosas— en estos sitios no faltó el recurso humano altamente calificado y esos servicios no quedaron desprotegidos”.
Modificaciones necesarias y certeras fueron el seguimiento perfeccionado a la embarazada desde una base de datos, lo cual posibilitó detectar a tiempo el riesgo que tienen algunas al ser captadas, debido a enfermedades que padecen, de ahí la atención personalizada conseguida.
“En estos meses, comentó Ivette, se destinó para una consulta a un perinatólogo (obstetra especializado para el riesgo, tanto para la mamá como el bebé, alrededor del nacimiento), proceder que llegó para quedarse y debe impactar en dos problemas que tiene la provincia: los fallecidos y morbilidad pediátrica en las terapias neonatales y las enfermedades en las maternas relacionadas con el parto pretérmino que afecta al recién nacido y tiene que ver con síndrome de flujo vaginal y problemas de tratamiento y seguimiento. Por ello dirigimos las búsquedas de estas causas en gestantes vulnerables y de alto riesgo, sobre todo entre las 25 y 34 semanas de gravidez. Este especialista es intinerante, lo llevamos al lugar que sea pertinente”.
En esta etapa crucial para la Salud Pública, y como una iniciativa en la provincia, se tuvo en cuenta a profesores de tribunales acreditados para la ultrasonografía prenatal, tanto para diagnósticos de malformaciones congénitas como para conocer factores de riesgo obstétrico por medio de la nueva tecnología, como: el doppler, de primer nivel.
“Estos expertos capacitan a quienes manejan los equipos y esta praxis se convierte en un ejercicio metodológico, docente y asistencial. Dan el visto bueno acerca de quiénes están listos para asumir la responsabilidad, algo que quedará de manera sistemática en nuestro estilo de trabajo, el que fue impuesto por la COVID-19 en Guáimaro, Florida, Nuevitas y Santa Cruz del Sur. Así las mujeres se moverán menos de sus localidades o asistirán a las más cercanas”.
Los municipios de Jimaguayú, Sierra de Cubitas y Carlos M. de Céspedes no disponen de equipos de ultrasonido, y otros por problemas de roturas; sin embargo, se garantiza el servicio en los sitios más cercanos a esas localidades.
“Estamos seguros —abundó— que serán evitados nacimientos pretérmino y se diagnosticarán a tiempo fetos con crecimiento intrauterino retardado (CIUR)”.
La especialista mencionó el estudio que se realiza para descentralizar la detección de mujeres con diabetes gestacional, de acuerdo con los parámetros de calidad de los laboratorios de las áreas de Salud, aunque se mantendrá el seguimiento en la consulta provincial que radica en el hospital materno infantil Ana Betancourt.
“La tasa de fallecidos por mil nacidos vivos es de cuatro en lo que va del 2020, con 13 fallecidos como sucedió en igual etapa del año anterior, y se mantienen sin defunciones en niños menores de un año los municipios de Carlos M. de Céspedes, Esmeralda, Sierra de Cubitas, Minas, Guáimaro, Vertientes, Jimaguayú y Santa Cruz del Sur.
“El papel de la familia es vital, pues la mortalidad por accidentes resultala principal causa de muerte en niños de todas las edades en nuestra provincia, algo que por lo general ocurre en pequeños sanos. Son las calificadas como causas no intencionadas, y a la vez, pueden evitarse, como son los casos de colecho, broncoaspiración por objeto extraño e intoxicación exógena (por suministro de anisón), como ocurrió en los menores de un año. En el resto de las edades fueron: ahogamiento en presas, accidentes del tránsito e intoxicaciones exógenas”.
Otros decesos respondieron a enfermedades crónicas de la infancia como son: las parálisis cerebrales, afectaciones cardiovasculares y arritmias.
“Reportamos casi 382 nacimientos menos al compararlos con el 2019 y por debajo de 778 si tenemos en cuenta los de igual etapa del 2018. La terminación voluntaria de embarazo estuvo pareja, en ocasiones, con la cantidad de nacimientos; en otras tuvimos 100 partos y 103 abortos. Las interrupciones de embarazos en las adolescentes ha disminuido algo, no lo necesario. Fueron tres las muertes maternas, una de ellas con dirección en Camagüey, pero residente en otra provincia”.
“Destaca la disminución de infecciones propias de la comunidad, en estos tres meses de confinamiento. Han sido reportadas mucho menos enfermedades respiratorias, las salas especializadas en este tipo de padecimientos permanecieron casi sin pacientes, no hemos asistido neumonías graves de la comunidad, ni meningoncefalitis con afecciones graves ni fallecimientos por este problema, en una época del año que las morbilidades de este tipo abundan siempre. Y esta es una alerta de que a los niños hay que cuidarlos, mantenerlos con el continuo lavado de manos, bajo la protección del nasobuco o mascarilla, no exponerlos a personas enfermas, no llevarlos adonde haya aglomeraciones de personas, todo esto va a repercutir no solo dentro del contexto de la COVID-19 sino en el de otras dolencias.
Foto: Orlando Durán Hernández /Adelante
“La lactancia materna es un tema recurrente, y de acuerdo con los estudios que realizamos, la mayoría de los niños que enferman no tienen apego a este tipo de alimentación natural, mientras está demostrada su protección, que no hay prácticamente contraindicaciones para suministrarla y sí dificultades nutricionales, algo que sucede por la introducción de alimentos no indicados.
“Si nos ocupamos del bebé desde que está en el vientre materno, garantizamos que nazca sano, sobre todo que crezca bien dentro de la barriga porque si no es así, no crecen adecuadamente ni el cerebro, ni los riñones, ni el corazón, y no será un niño ni un adulto sano y lo otro es que nazca cuando le toca”, aseveró.
La encargada del PAMI comentó que la salud en la mujer es vital para estar preparada a concebir un embarazo, tener un buen parto y que el bebé nazca saludable, y hay que empezar por la dieta, hacer ejercicio físico, pues la obesidad constituye un problema de salud en la población camagüeyana en edad fértil, lo que, a su vez, lleva a la hipertensión, a la diabetes, y aunque tengan buena edad para concebir, padecen de enfermedades crónicas que le comprometen el embarazo.
“En las infecciones de transmisión sexual, agregó, radica otro problema que quizá no se ve explícitamente, pero están las infecciones vaginales por clamidia y Micoplasma genital (MG), una infección que en muchos casos no presenta síntomas, pero puede dejar a algunas mujeres infértiles porque provocan obstrucciones tubáricas o de las trompas de Falopio, o llevarlas al embarazo ectópico (cuando el óvulo se une a un lugar fuera del útero, por lo general dentro de las trompas de Falopio), y en esta provincia se presenta una cantidad elevada de ectópicos, lo que constituye una alerta de la presencia de las infecciones de transmisión sexual.
“Es importante conocer que el ectópico transita mejor si se acude al médico precozmente ante el dolor abdominal, con pérdida menstrual o no, ausencia o no de la menstruación, puede o no tener manchas, y la mujer no debe dudar en preguntar al médico si sus síntomas estarían relacionados con este problema que es bien complicado si no recibe diagnóstico a tiempo, porque incluso en épocas de cualquier epidemia podemos pensar de manera errada, pues este padecimiento se parece a otras entidades médicas y la sospecha es fundamental”.
Resulta vital que las mujeres conozcan que sus vidas corren peligro durante el embarazo ante episodios de hipertensión arterial y la preeclampsia, debido a esto sus bebés nacen antes de tiempo y este es un pretérmino extremo, incluso, el feto muere intraútero por esta causa y el embarazo tiene que ser captado precozmente y en el primer trimestre puede ser muy beneficiada y evitadas muchas de estas consecuencias.