CAMAGÜEY.- El 4 de enero, 65 años después del paso de Fidel y el triunfante ejército de barbudos por Camagüey, se reeditó la efeméride en la provincia con una nueva Caravana de la Libertad, dedicada además al aniversario 35 del Movimiento Juvenil Martiano.

Integrantes de esa organización, y de otras como la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC), la Federación Estudiantil Universitaria (FEU) o la Organización de Pioneros José Martí, conformaron la delegación que recibió en Guáimaro a su homóloga procedente de Las Tunas.

El encuentro ocurrió frente a la casa de la familia Manduley, parientes de la guerrillera Celia Sánchez, lugar donde el Comandante se detuvo a desayunar al llegar a territorio agramontino aquel histórico día.

Camagüeyanos y tuneros caminaron juntos hasta el Parque de la Constitución, para realizar allí la entrega de las banderas que simbolizan la continuación del recorrido.

 "Somos una generación que pese a las vicisitudes se levanta cada día en función de construir ese socialismo próspero y sostenible que aspiramos, porque tenemos una Revolución que nos legaron nuestros líderes históricos y ser consecuentes con ellos es estar aquí reeditando este momento", comentó a Adelante Digital Milena Pérez Correoso, primera secretaria de la UJC en Las Tunas.

 "Volver a rememorar la entrada de la Caravana de la Libertad justo cuando estamos en el marco de las celebraciones por el aniversario 65 del triunfo de la revolución, y que los protagonistas seamos los jóvenes es todo un orgullo y un compromiso, porque sabemos el momento histórico que vivimos", aseguró Laura Mariam Bacallao Padrón, diputada a la Asamblea Nacional del Poder Popular por el municipio Guáimaro, y secretaria de la UJC en la Universidad de Camagüey (UC). "Es una muestra de la unidad de la historia, entre los Pinos Nuevos y los Viejos, pues nos acompañan combatientes", agregó.

Gabriela Prince Pérez, presidenta de la FEU en la UC, también se enorgullece de ser partícipe de este hecho: "me toca representar a la universidad y sus estudiantes, demostrar que somos jóvenes comprometidos con nuestra historia, acordes a nuestros tiempos y a las tareas que se nos asignan."

Una de las que acumula ya tres años integrando la caravana es Zuremis Delgado Arribas, de la Universidad de Ciencias Médicas. "La primera vez que vine estaba llena de nerviosismo, es algo que realmente te marca, porque formas parte del camino y legado que hemos construido, ahora me encuentro acá con muchas de las mismas personas y espero continuar participando durante toda mi etapa de estudiante. La Revolución puede contar con los jóvenes universitarios cuando nos necesite."

Así lo demostraron, pues ni la lluvia logró amargarles la celebración durante el trayecto hasta la ciudad de Camagüey, donde los esperaba una congregación en la Plaza de la Libertad, sitio en el que Fidel se dirigió a los agramontinos el cuarto día de 1959.

En esta ocasión el discurso estuvo a cargo de Kely Álvarez Fernández, primera secretaria de la UJC en la provincia, quién rememoró muchos de los cambios positivos que trajo aquel triunfo, y refirió que: "La Revolución es nuestra madre, pasa ahora por momentos difíciles, y nos toca a los jóvenes tenderle las manos, servirle de apoyo y ayudarla a seguir andando. Trabajar es la palabra de orden hoy".

En el acto participaron los máximos dirigentes políticos y gubernamentales del territorio, y se entregaron carnés a nuevos militantes del Partido Comunista de Cuba y la UJC.

Durante el viaje desde Guáimaro a Camagüey, la caravana recibió el cariño de la gente en diferentes poblados de la carretera central, y luego en su paso por calles de la ciudad, hasta la llegada a la plaza.