CAMAGÜEY.- Lester Ortega Álvarez es uno de los estudiantes de la Universidad de las Artes (Isa) que no ha podido regresar a La Habana debido a la pandemia de la COVID-19, pero no ha perdido el tiempo en esta ciudad.
“El programa de estudios se maneja por prácticas. Desde abril preparo un proyecto de exposición acerca de las teorías de la alienación, la virtualidad”, contó a Adelante Digital, sin apartar el pincel del lienzo.
El alumno de segundo año de Artes visuales hace la obra en la Sala Internacional de la Cerámica de Arte, lugar donde defendió la tesis de Escultura para egresar de la Academia de las Artes Vicentina de la Torre.
“Oscar Rodríguez Martínez fue mi tutor en cuarto año de la Vicentina. Considero una oportunidad trabajar con él. Tenemos puntos en común en cuanto a ideas sobre arte y música”, explicó.
Precisamente, en la capital, Lester participa del proyecto multidisciplinario El reflejo en expansión, liderado por un músico. Esa sed de integración de los jóvenes artistas constituye un estímulo del ambiente del Isa.
“Siempre estuve inclinado hacia la pintura. Me interesa seguir estudiando y profundizar. El Isa tiene un programa a nivel más conceptual para acentuar tu camino”, añadió.
Cuando llegue febrero del 2021 y retorne a la escuela, podrá relatar de la estancia fecunda en Camagüey, donde expuso el cuadro Los perros tienen el color de la noche, en la muestra colectiva Cuarenta en cuarentena, exhibida en julio en la galería Alejo Carpentier.
“Lester es lo que mantiene viva la Sala de Cerámica. Es su pulmón. Eso se lo voy a agradecer siempre”, enfatizó Oscar, director artístico de la institución cerrada al público por el deterioro del inmueble.
El vínculo con los estudiantes está implícito en el objeto social de allí, de hecho, el jovencito estuvo entre los fundadores del taller de cerámica del espacio localizado en la céntrica calle República.
“La Vicentina cubre sus necesidades de materiales. Él viene a pintar su obra. Con Lester he aprendido mucho. Me enseñó mezclas y cosas de colores”, mencionó Oscar, también implicado con Jorge Félix Peña, de segundo año de Restauración.
“Se trata de un aprendizaje de los tres”, resume el artista con 17 años de experiencia como profesor de la Vicentina, donde imparte el Taller fundamental de Escultura y el Taller opcional de Cerámica.
Otro detalle: justo cuando Oscar cumple 25 años de trayectoria artística, comenzó una serie pictórica en plena cuarentena, debatida y realizada con la asesoría de Lester.
“Mística de lo inmóvil es una exposición de dos símbolos: una estatua y una mancha. Llevaba un rigor académico al que nunca me había sometido.
Necesitaba alguien con conocimiento, dispuesto a ayudar. Enseguida pensé en Lester. Somos amigos que nos hemos vinculado profesionalmente”, concluyó.