Si es usted de los que disfruta historias de muertos, casas embrujadas, jinetes sin cabeza, monstruos, monedas enterradas y apariciones de santos, debe buscar, sin lugar a dudas, El ahorcado de Aguas Negras (Cuentos de aparecidos) publicado por la Editorial Ácana y con la firma autoral de René Batista Moreno.
Nacido el siglo pasado en Camajuaní, este autor dedicó su vida a la salvaguarda del folclor campesino cubano, trasmitido, de generación en generación, gracias a la oralidad. René Batista, desde su temprana juventud, recopiló este conjunto de más de 200 testimonios breves.
Más allá de juzgar la veracidad de estas historias, lo trascendente es el despliegue de un imaginario cubano y campesino que se ponía a prueba cada noche en las tertulias guajiras. Debió ser todo un festín asistir a ellas. En esas auténticas noches debieron lucir su mejor guayabera los más diestros narradores orales. Esos que, sin conocer siquiera el alfabeto, sabían poner la piel de gallina al público asistente con las historias que hoy ponemos a disposición del lector.
Pero si todavía estas líneas no le convencen, le invito al Centro Cultural Librería Antonio Suárez. Solicite a las libreras El ahorcado de Aguas Negras (Cuentos de aparecidos). De noche y sin fluido eléctrico, siéntese a leer estas historias, solo con la tenue luz de un mechón. Después, me cuenta.