CAMAGÚEY.- Por estos días Camagüey vuelve a ser el epicentro del pugilismo cubano, pues tras finalizar el ll Torneo Playa Girón de Boxeo Femenino, el ring emplazado en el Palacio de los Deportes Rafael Fortún Chacón acoge la final de la Serie Nacional masculina.
En la lid para mujeres, Guantánamo dominó por equipos con 18 unidades, escoltadas en el podio por habaneras y santiagueras en ese orden. Las únicas que repitieron título en esta ocasión fueron la villaclareña Melani Girado, de estreno de los 57 kilogramos (kg), y la medallista de bronce centroamericana de San Salvador 2023 Yaquelin Estornell, nuevamente en los 66 kg, deportista guantanamera que resultó también la más combativa del certamen.
En los 50 kg, Yailena Palomo, de Matanzas, mejoró el color de su presea anterior, al vencer en cerrado desafío a la representante del Guaso Daily Sterling. Los 54kg estrenó cuadro de honor completo y la nueva soberana resultó Julianne Díaz, de las más oriental de las provincias, victimaria de la jovencita capitalina Magda Massó. Melisa Miyares, de Cienfuegos, fue una de las sorpresas al derrotar en la final de los 60kg a la subtitular del pasado año, la santiaguera Diana Mesa, en tanto el plato fuerte del cartel final quedó para la discusión del título en los +66kg, combate dónde la capitalina Yoana Rodríguez tomó desquite de lo ocurrido en 2023 y derrotó por decisión divida a la indómita Dayira Mesa, en el que fue el mejor combate de la justa.
Aunque queda mucho trabajo para colocar a nuestro boxeo femenino en la élite internacional, esta edición mostró significativos pasos de avance en cuanto a convocatoria, preparación física de las muchachas, calidad de los elementos técnico - tácticos, así como la combatividad encima del encerado, lo que brindó como resultado que solo dos provincias no obtuvieran preseas.
Las agramontinas repitieron el resultado de la pasada cita, con un bronce al pecho de Norelis Sánchez en los 54kg, para culminar en el octavo lugar por puntos, no obstante, el número de atletas con respecto a la campaña anterior se duplicó, ventajas de contar con una buena reserva con miras a futuro, según afirmó Ana de la Caridad Cruz Peraza, entrenadora principal.
A inicios de semana tocó el turno a los varones, con presencia de siete selecciones provinciales (Guantánamo, Holguín, Sancti Spíritus, Cienfuegos, Matanzas, Pinar del Río y los anfitriones), cada una clasificada por su zona geográfica. Grandes rivalidades en lo colectivo y lo individual se han vivido en las primeras jornadas del evento, en las que varios púgiles de la preselección nacional se han visto en aprietos ante peleadores que se preparan en sus territorios. Ha sido un lujo para los aficionados locales ver en acción, por ejemplo, al vigente campeón olímpico Erislandy Álvarez.
El elenco revelación del certamen ha sido el holguinero, que no ha creído en favoritos como los espirituanos y pinareños. Sin embargo, los Guerreros de El Mayor mantienen el invicto en tres presentaciones y se enfilan a retener la corona cubana. Liderados por prometedoras figuras como Nelson Williams (92 kg), Yenier Sorzano (71kg) y Maruán Roque (75 kg), al amanecer de este viernes los locales lideraban la tabla con 156 unidades, pese a ya haber consumido su día de descanso.
Este fin de semana se decidirá la Serie Nacional, y para los carteles finales el alto mando camagüeyano ha reservado al bicampeón olímpico Julio César La Cruz, quien tras defender con éxito su cinturón profesional de IBA la pasada semana, viajó inmediatamente a su patria chica para capitanear a sus compañeros. Esta no es solo una muestra de compromiso de La Sombra, también es un llamado claro por parte de los organizadores de que para integrar la próxima preselección cubana, todas nuestras figuras deben ganárselo sobre el cuadrilátero.