CAMAGÜEY.- Más allá de ser el color de un tipo de caballo, en Cuba, Alazanes es sinónimo de poder ofensivo en el béisbol. Por eso llama la atención cuando un lanzador domestica los bates granmeses como hizo este miércoles Juan Sebastián Contreras, para garantizar el triunfo de sus Toros, dos carreras por cero.

Resulta más interesante porque no es la primera vez que el derecho del reparto Albaisa domina el brío de la tanda de los actuales campeones nacionales: las tres veces que ha abierto frente a ellos en su corta carrera, ha salido airoso.

La de hoy fue su mejor actuación desde que debutó en Series Nacionales el cinco de septiembre de 2017. Nueve entradas en las que solo admitió una carrera sucia, seis imparables (todos sencillos), regaló un solo boleto y repartió nueve dosis de agua de tinajón confluyeron para su cuarta victoria de la temporada.

No obstante, tuvo que esperar hasta la última jugada del choque para sonreír, porque enfrente se plantaron el zurdo Yunier Castillo y los diestros Juan Danilo Pérez y Carlos Santana en un excelente concierto de pitcheo. Castillo colgó ceros en las cinco primeras entradas y en el sexto Leonel Moas Jr. sacó la pelota del estadio Cándido González por la banda izquierda para poner el 1-0 en la pizarra mecánica.

Lo de Contreras parecía lechada, pero en el octavo Luis Gómez cometió error en tiro sobre un toque de bola del emergente Pedro Almeida, que este aprovechó para llegar a segunda. Luego David Tamayo dio hit al jardín central y pese a que Francisco Venecia bateó para doble play, Almeida entró con el empate.

En el noveno, Juan Sebastián retiró a paso de conga a los peligrosos Guillermo Avilés, Lázaro Cedeño e Iván Prieto y dejó la mesa servida para el final feliz. Jorge Cardoza abrió la parte baja del inning conclusivo ratificando su condición de mejor emergente del país en las últimas tres campañas con inatrapable al bosque de la derecha, pero seguidamente Michael Thompson no cumplió su sacrificio al tocar la bola de frente al lanzador para facilitar que forzaran en segunda base al corredor sustituto Adrián Hernández.

Asnier Fonseca volvió a prender fuego a las gradas con hit de emergente a la banda izquierda y tras el fallo de Moas Jr en elevado al derecho, el capitán Alexander Ayala volvió a vestirse de héroe con un cañonazo el fondo del jardín central que dejó tendidos en el campo a los Alazanes.

Jockey, la palabra de origen inglés que en la actualidad nombra a los jinetes de carrera, fue en su origen el diminutivo del nombre propio escocés Jack (en español, Juan), por lo que podemos trasladarla perfectamente para apodar al espigado serpentinero camagüeyano que se ha puesto los grados de líder del staff.

Gracias a él los Toros se mantienen flotando en la parte media de la tabla general de la 61 Serie Nacional de Béisbol con 10 éxitos (cuatro con el sello de Contreras) y 12 fracasos, específicamente compartiendo los puestos 11 y 12 con Las Tunas. Ahora la distancia respecto a Matanzas, dueño de la cima, es de cinco puntos, mientras que solo una unidad los separa de La Isla, ocupante de la última casilla de postemporada.

De hecho, si mañana el derecho pinareño Pedro Luis Guzmán contribuye a un nuevo triunfo de Camagüey, podría ascender por primera vez a los lugares de privilegio desde que comenzó el certamen. Para lograrlo, la tanda taurina tendría que producir frente al diestro Joel Mojena, uno de los mejores lanzadores de la plantilla de los titulares defensores. Será un partido en el que ambas novenas echarán el resto para ganar.